Roma es una de las ciudades más encantadoras del mundo y cada año más de diez millones de personas acuden en masa a la Ciudad Eterna para descubrir su asombrosa historia y la cultura de la que todavía se jacta hoy. Sin embargo, visitar esta ciudad única sin perderse nada es muy poco probable: con una bicicleta eléctrica acelerarás tu visita.
Con total autonomía y sin demasiado esfuerzo, pasearás y visitarás tanto los lugares emblemáticos como los pequeños callejones desconocidos y las vistas que de otro modo te habrías perdido. ¡No tendrás más problemas con el tráfico y conducir cuesta arriba será muy fácil! Tanto niños como adultos pueden disfrutar de esta forma única de hacer turismo: una experiencia perfecta para toda la familia.