Desde su hotel en San Pedro de Atacama, diríjase hacia el sur hasta el Salar de Atacama, el más grande de Chile, con más de 3.000 kilómetros cuadrados. El agua turquesa y los bordes blancos con sal cristalizada de la laguna Cejar invitan a disfrutar de un baño. Es el lugar perfecto para ver flamencos rosados y patos "tagua". El vasto paisaje del Salar y las montañas de los Andes son el escenario perfecto para una tarde de natación de 30 minutos, que sin duda es la atracción principal del efecto flotante debido a la alta concentración de sal.
Continuando hacia el sur, visitará los Ojos del Salar, dos lagos con menos salinidad en sus aguas, utilizados por los visitantes para deshacerse de la sal del baño anterior. Estas lagunas son una atracción debido a la formación geológica.
Finalmente, al viajar a la laguna de Tebenquiche, quedará encantado con la puesta de sol y los coloridos reflejos de las montañas en el agua. Una vez que su gira ha llegado a su fin, es hora de regresar a su hotel en San Pedro de Atacama.