Pompeya y Herculano son visitas obligadas en la Riviera napolitana. Estas dos ciudades romanas fueron enterradas tras una catastrófica erupción del Vesubio en el 79 d. C. Ahora descubiertos, ambos son sitios del Patrimonio Mundial de la UNESCO y ofrecen una visión intrigante y, a veces, inquietante de la vida en la época clásica.
Por la mañana, su guía lo llevará a través de Pompeya, que fue cubierta por ceniza volcánica. Vea las lujosas villas de la élite romana (todavía se pueden ver frescos en las paredes), así como espacios públicos como el Foro. Pasee por sus calles adoquinadas mientras contempla los restos de templos y villas.
Después del tiempo libre para almorzar, diríjase al sitio arqueológico de Herculano. A diferencia de Pompeya, fue envuelta por un deslizamiento de tierra. Aprenda sobre esta antigua ciudad costera recuperada del olvido. Verá los cobertizos para botes que son el lugar de descanso final de muchos refugiados, así como pisos de mármol, mosaicos y frescos.