El día comienza con un pintoresco viaje a la ciudad de Ston, famosa por sus murallas y sus salinas. Siendo una de las más largas de Europa, las murallas de Ston encierran una rica historia marítima y una importancia estratégica que descubrirá durante una visita guiada. No se pierda una visita a las históricas salinas, donde podrá comprender la importancia de la producción de sal en la historia y la economía de la región.
La aventura continúa en Korčula, una ciudad impregnada de antiguas raíces griegas que desempeñó un papel fundamental durante la República de Venecia. Mientras pasea por sus calles medievales, quedará cautivado por la Catedral de San Marcos y descubrirá el Museo Marco Polo, que ofrece información sobre la vida del legendario explorador. Korčula ofrece un refugio tranquilo, que le permitirá conectar con su espíritu adriático.
El viaje le llevará a Pelješac, donde le espera una cata de vinos. Rodeado de vistas costeras, saboree vinos locales como el Plavac Mali. Con su centenaria tradición vinícola, Pelješac ofrece una inmersión profunda en el patrimonio de Croacia. La excursión concluye con un cómodo traslado a su alojamiento en Dubrovnik.