Pase un tiempo con una familia local en su mesa de comedor con esta experiencia. Cada reunión es personal, con solo su pequeño grupo y la familia, lo que crea momentos especiales que atesorará.
Comience con una bebida de bienvenida y vea cómo puede ayudar a comenzar con los preparativos de la comida. No querrás olvidarte de llevar tu cuaderno para capturar los ingredientes de esta parte. Tome fotografías y chatee con la familia que habla al menos algo de inglés básico. Además, vea qué palabras y dichos locales puede aprender.
Hable con la familia anfitriona sobre cualquier cosa que le gustaría saber, incluso compartir algunas cosas sobre usted y su país de origen. A la mayoría de las familias locales les resulta muy interesante escuchar sobre otras culturas, por lo que esto beneficiará a ambos. Por último, disfrute de la comida y sonría al ambiente que completa esta memorable actividad.