Relájese de pies a cabeza en un baño romano tradicional. Costumbre que se remonta al Imperio Romano, la historia del baño no se limitaba a la limpieza, sino que era una parte esencial de la vida: estos magníficos templos de mármol ayudaban a crear vidas sociales que consistían en baños, masajes y amistades.
Sumérjase en esta antigua cultura y descubra los placeres de los baños de vapor, las piscinas de agua fría y caliente, las fuentes y las salas de mármol, todo bajo el mismo techo abovedado del Hammam de Aremis. Alivia el estrés, alivia las tensiones musculares y la rigidez de las articulaciones, estimula la circulación, elimina las toxinas de la piel e incluso refuerza el sistema inmunológico.
Hay un equipo de expertos dispuestos a mostrarle los poderes purificadores del agua. Le ofrecerán una amplia gama de tratamientos que se adaptan a todas las necesidades, edades y presupuestos, todos ellos garantizados para ahuyentar sus preocupaciones en la atmósfera única del hammam.