Disfrute de la belleza prístina de Kazán, vea con sus propios ojos los colores brillantes de sus calles y plazas, descubra dónde se almacenan los innumerables tesoros de los khans de Kazán y dónde hierve el agua en un caldero sin fuego, haciendo un recorrido turístico.
La ciudad milenaria combina la cultura de Occidente y las tradiciones de Oriente: el antiguo asentamiento tártaro, donde vivieron los tártaros en el siglo XVI, el asentamiento textil nacido de las reformas industriales de Pedro el Grande, la plaza de la Fuente, el lago Kaban con sus misterios y leyendas, la aldea tártara Tugan Avylym, el nuevo edificio del teatro de marionetas, la Universidad Federal de Kazán, la plaza de la Libertad como centro cultural y administrativo de Kazán.
Durante este recorrido turístico, verá muchos minaretes y cúpulas, medialunas y cruces, lo que es una prueba de la buena vecindad de los dos pueblos indígenas que comparten esta región: los tártaros y los rusos.
El Kremlin de Kazán es la principal atracción de la ciudad, un sitio del patrimonio mundial de la UNESCO. El Kremlin es la residencia oficial del presidente de la República de Tartaristán y el Museo-reserva estatal, que es visitado por miles de turistas cada año. La fortaleza de piedra blanca es el corazón de una ciudad antigua que ha absorbido la cultura de Oriente y Occidente. Los minaretes de Kul Sharif, la mezquita principal de la ciudad, se elevan hacia el cielo, y las cúpulas de la Catedral de la Anunciación, la más antigua de Kazán, brillan con oro. Dentro de la fortaleza se encuentra uno de los símbolos de Kazán: la famosa torre "caída" de la reina Suyumbike.