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La huella de la Madre Naturaleza no es la única que cobra importancia en Lanzarote. Este recorrido de medio día observa de cerca a uno de los hijos más famosos de la isla. Visitarás sus Jameos del Agua y el Mirador del Río. Y también descubrirás el Valle de las Mil Palmeras y Teguise. Cristina, una de nuestras guías expertas, dice: 'El artista local César Manrique fue para Lanzarote lo que Gaudí fue para Barcelona. Su visión arquitectónica y su activismo nos dejaron un estilo único en armonía con nuestros paisajes volcánicos y también ayudaron a preservar la isla: se oponía a los hoteles de gran altura, por lo que se construyeron muy pocos.'
El descubrimiento comienza en el complejo diseñado por Manrique construido alrededor de las cuevas volcánicas de Jameos del Agua. Los convirtió en discoteca en los años 60. El escenario todavía está en uso, pero las estrellas hoy en día son los raros cangrejos blancos en un estanque de agua salada. A continuación, atravesaremos espectaculares paisajes volcánicos hasta el Mirador del Río, otra obra maestra de Manrique. A casi 500 metros sobre el nivel del mar, ofrece inmejorables vistas sobre la isla de La Graciosa y sus volcanes.
Después de visitar a un productor de Aloe Vera para conocer los secretos de esta versátil planta, pasarás por una serie de bonitos pueblos y cruzarás el Valle de las Mil Palmeras de camino a Teguise. Como antigua capital de la isla, este pueblo lleno de historia cuenta con una serie de llamativos palacios, conventos, capillas e iglesias, todos a poca distancia unos de otros. Disfrute de tiempo libre para pasear y tomar fotografías en el evocador centro de la ciudad.
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